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el placer de devorarse

CENA DE EMPRESA

El miércoles que viene tengo la cena de empresa... será salir corriendo del trabajo e ir para allá, ya lo estoy viendo, y como siempre, el dilema con el vestuario es el tema central de las conversaciones (no solo femeninas). Si nos tenemos que ayudar de la revista de moda que mirábamos ayer, se llevan los escotes en T (que son esos que salen de la espalda para juntarse sobre el pecho y de allí juntarse otra vez en la nuca, como un 8), el satén, los vetiditos de inspiración helénica (estilo ninfa) y los broches como sean y donde sean. El escote en T no me gusta, los broches tampoco y los vestiditos de diosa del olimpo no los veo muy apropiados: me queda el satén, que sí me gusta. Tengo una falda en satén rojo que me mira desde el armario y me dice: "-Tienes lo que hay que tener?" Y yo creo que la respuesta va a ser no... No es demasiado de... noche? "-Y cuando es una cena si no de noche?" pregunta ella. Pues también es verdad. Mientras pienso en la falda, mi compañera hace inventario de mi armario para aconsejarme, mientras recuerda su modelito de la cena anterior y, de paso, el de todas las chicas de la empresa. Son más bien clásicas, y tampoco es plan de llegar a matar...
El compañero de la mesa de detrás dice que ojalá les hicieran ir con traje, así no tendría dudas sobre si ir arreglado o informal. Y del fondo se oye una voz que dice: "creo que no voy a ir..."
A decir verdad me preocupa menos de lo que aparento, mi armario está surtido y tengo algunos días por delante para comprar lo que necesite, pero es divertidísimo oir una y otra vez... "la camisa a rallas te sienta bien" "estos zapatos, se ven demasiado juveniles?" "si voy con camisa, mejor oscura, no?" "yo sigo diciendo que no voy, que verguenza" "lo del vestido ninfa lo descartamos seguro, ¿eh?" y así una y otra vez... Entra alguien de otro departamento y lo mismo:
"-Vais a ir a la cena? Tías, que os vais a poner? Dicen que se llevan los vestidos años 50, rollo "Grease" o años 20, un poco Charleston. El satén y los tonos fuertes, la pedrería y los estampados, porque un vestido largo sin duda sería demasado..."
Pero que pasa, si se lleva todo!!!! Yo tengo la cabeza como un bombo y desisto... total, a la mitad no nos da tiempo de pasar por casa a cambiarnos de ropa, y no voy a llegar a plena luz del sol con un vestido de náyade en satén con pedrería bordada en el escote de T y de color, pongamos, azulón... "-Que no, que creo que no voy" ...

1 comentario

Carlos -

¡Daría -por lo menos- dos dedos (pero de los pies, que son los que menos se verían) por verte en esta cena! (por no decir que me quedaría sin dedos por ver las dos o tres horas de intesivos probares de ropa previas a la cena) :-P